EL NACIONAL - Sábado 7 de Abril de 2007
El Tejado Roto
¿Inflexibles o brutos?
RAMÓN HERNÁNDEZ
Algunas personas logran la fama y un sitio en la posteridad gracias a unafrase oportuna o brillante. La escritora y periodista estadounidense Mary
McCarthy fue la que dijo que todo lo que decía Patricia Highsmith, la autora
de la desgarradora denuncia contra la cacería de brujas del macartismo, era
mentira "incluidos artículos y conjunciones". Nosotros hemos constatado en
los últimos años que tal desproporción de la mentira es posible; que los
funcionarios gubernamentales pueden mentir no sólo con el significado de las
palabras sino también con la entonación. Cuando pronuncian "frío", la
audiencia escucha "caliente" y casi siente que la palabra le quema la lengua
a quien la dice. También fue Mary McCarthy la que dijo que la burocracia, el
gobierno de nadie, ha devenido en la forma moderna del despotismo. Lo hemos
constatado.
Otro periodista menos conocido, Pedro Galán Vázquez, repetía que lo malo del
ignorante no era tanto el saber que le faltaba, sino la audacia que le
sobraba. Ahí podría estar la explicación de que hayamos pasado una Semana
Santa tan parecida a las vividas en la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, y
unos trancos más acá, cuando en la fecha conmemorativa de la pasión y muerte
de Jesús en la cruz la única música que transmitían las radioemisoras era
clásica, sin importar que fuese allegro o apresuratta, mientras que en el
cine y en la televisón sólo proyectaban películas sobre temas religiosos.
Ninguna encuesta ni algún estudio científico ha demostrado que con tales
restricciones estábamos más cerca de ir al cielo. Tampoco creo que con las
restricciones impuestas por el gobierno rojo rojito (que le teme más a
Marcel Granier que a Carlos Marx, a pesar de los millones de muertos que
este último tiene en sus alforjas) hayamos ganado más seguridad en las
carreteras, no importa las cifras que muestren, sabemos que, como con la
inflación, mienten hasta "en los artículos y conjunciones". Yo vi, en el
pedazo de vía más vigilado del país, la trocha de la Caracas-La Guaira
("tremenda carretera") que los motorizados bajaban con la fría en la mano y
nadie los paraba, ni siquiera para preguntarles en cuál licorería la habían
comprado. Uff. ¿Vacaciones o asueto cubano?
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